¿Qué es el cuidado de las plantas y por qué es importante?
El cuidado de las plantas es una parte importante de la jardinería y puede marcar una gran diferencia en la salud y la apariencia de sus plantas. Se trata de proporcionar los nutrientes, la luz, el agua y las condiciones del suelo adecuados para que sus plantas prosperen. El cuidado de las plantas también incluye la poda, el control de plagas y otras tareas de mantenimiento que ayudarán a mantener sus plantas saludables. Al cuidar adecuadamente sus plantas, puede asegurarse de que se vean lo mejor posible y le brinden años de disfrute.
- La planta debe coincidir con el tamaño de la habitación. Al elegir una planta, préstale atención a su tamaño. Las plantas grandes no tienen lugar en una habitación pequeña. Las pequeñas, se pueden colocar en el alféizar de una ventana o en un estante. ¡Ubica a las gigantes verdes en una espaciosa sala de estar! ¡Ahí estarán cómodas!
- Considera plantas pet-friendly si tienes mascotas. Si tienes una mascota, sabes lo importante que es mantener a tus amigos peludos seguros y saludables. Afortunadamente, hay muchas plantas aptas para mascotas que puedes tener en tu hogar sin preocuparte por los efectos dañinos en tus mascotas. ¡Desde suculentas fáciles de cuidar hasta helechos exuberantes, hay muchas opciones para los dueños de mascotas que desean agregar algo de vegetación a su hogar sin ningún riesgo!
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La planta necesita luz.Las plantas son una parte esencial de la vida en la Tierra y necesitan luz para sobrevivir. Sin luz, las plantas no pueden realizar la fotosíntesis, lo que significa que no pueden usar la energía del sol para crear alimentos. Por eso es tan importante para nosotros proporcionar a las plantas suficiente luz para mantenerlas sanas y en crecimiento.
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Cada material para macetas tiene características y ventajas distintas:
- Las macetas de barro son porosas y permiten la transpiración adecuada de las raíces, por lo que son ideales para las plantas que necesitan un drenaje rápido.
- Las macetas de cerámica tienen un acabado exterior para evitar que la humedad penetre hacia la tierra; este material le va muy bien a las Calatheas y a las Suculentas.
- Las macetas de fibra de vidrio son permeables y soportan temperaturas extremas; este es un material resistente y duradero que se adapta a todo tipo de plantas.
- Finalmente, las macetas de plástico son una opción muy popular, pero poco sustentable y que no dura mucho tiempo.
- La humedad es la base de la vida vegetal. El riego adecuado es tan importante para las plantas de interior, tanto como la luz. Las plantas deben regarse con agua del tiempo. El exceso de líquido debe fluir libremente por el orificio de drenaje de la maceta.
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Elige una tierra que favorezca su crecimiento. Al igual que con el agua, cada planta tiene necesidades distintas cuando se trata de la tierra donde va a vivir. Es muy importante que investigues, según la especie de tu planta, qué características debe tener el sustrato que usarás para su maceta. Una tierra preparada especialmente para plantas de interior es muy buena opción; la mayoría de estas mezclas incluyen hojas, troncos y más elementos que ayudan a que las raíces reciban el agua y demás nutrientes que necesitan para crecer y estar sanas.
Asegúrate de remover la tierra de tus plantas suavemente una vez por semana para evitar que se compacte. Hazlo con ayuda de una pala pequeña, solamente en la parte superior para ayudar al paso del agua y el oxígeno hacia las raíces.
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Mantenlas limpias quitándoles polvo y hojas secas. Las plantas respiran a través de sus hojas y por eso es básico mantenerlas limpias. Un primer paso es usar un trapo ligeramente húmedo para retirar el polvo de todas las hojas, hazlo cada vez que veas que se ha vuelto a acumular. Otra tarea de limpieza que debes hacer frecuentemente es quitarle las hojas secas y cortar las puntas que se hayan puesto cafés.
Tus plantas agradecerán muchísimo estas dos acciones y te recompensarán poniéndose más lindas y contentas. Al cumplir con estos cuidados de plantas y hacer la limpieza, pon atención y revisa si tienen algunas manchas, pues podría tratarse de alguna plaga o enfermedad que las estén atacando.
- Transplanta las plantas según sea necesario. Con buen cuidado, las plantas crecerán y se desarrollarán. Su sistema de raíces también crecerá, por lo que es necesario trasplantarlas hacia un recipiente más grande de manera oportuna. A veces, es preferible hacer un transbordo antes que un transplante. En este caso, la planta se saca de la maceta junto con un terrón de tierra y se coloca en un recipiente grande.
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Proteja a las mascotas de las plagas. Las mascotas pueden ser una gran fuente de alegría y compañía, pero también pueden ser vulnerables a las plagas de las plantas. Para proteger a su mascota de estos bichos, es importante reconocer los signos de una infestación y tomar medidas para prevenirlos. Desde el almacenamiento adecuado de los alimentos para mascotas, la limpieza e inspección regulares de las plantas y el uso de métodos naturales de control de plagas, hay una variedad de formas en que puede proteger a su mascota de las plagas de las plantas.
- Pódalas cada cierto tiempo para que se mantengan sanas. Cuando podas una planta, crece mejor porque las partes que le estás quitando le han robado nutrientes, le ayudas a que se vea mejor y, en casos específicos, evitarás que crezca demasiado. La poda consiste básicamente en cortar las hojas secas o que se han enfermado, y en el caso de las plantas con flores, aquellas que ya se han marchitado.
- Para hacerlo, usa unas tijeras de jardinería desinfectadas con alcohol para evitar generar cualquier propagación de plagas o enfermedades. Puedes podar tus plantas en cualquier época del año, pero el otoño es la época natural para hacerlo.
- Amor y atención. Las plantas de interior necesitan tu atención y cuidado. No solo debes regarlas, sino también eliminar las flores y hojas secas, remover el sustrato, organizar sesiones de luz y sombra. Recuerda limpiar el polvo con un paño húmedo. Y si la planta tiende a caerse, actúa de inmediato a través de un soporte que le permita mantenerse erguida.